En esta crisis, el Espíritu Santo está llamando a Su pueblo a despertar. No podemos presionar el botón de posponer en su alarma celestial. En Efesios 5:14, el Apóstol Pablo escribió, “Despiértate, tú que duermes. Levántate de entre los muertos y te alumbrará Cristo” (NVI). Quiero aplicar este versículo a nuestras vidas naturales y espirituales, porque ambas están entrelazadas.
- Aquellos que se levantan automáticamente sin ninguna alarma.
- Aquellos que ponen una alarma y se levantan de inmediato.
- Aquellos que ponen una alarma y cuando suena, proceden a posponerla una o muchas veces antes de finalmente levantarse.
He vivido las tres maneras en diferentes tiempos en mi vida. En este tiempo, ¿Cuál te refleja más en el sentido natural? ¿Qué hay espiritualmente? ¿Cuánto toma para que Dios te despierte? Responde esta pregunta honestamente.
Durmiendo en el Espíritu
Dios está llamando a Su pueblo a vivir totalmente despiertos. Desafortunadamente, muchos cristianos aún duermen en un profundo sueño espiritual—cabeceando debido a la pereza física, la pereza espiritual, o ambas. Ellos viven inconscientes del propósito de Dios de transformarlos y usarlos. ¿Por qué? Porque ellos siguen presionando el botón de posponer en la alarma de Dios—y al hacerlo, ¡ellos ponen una pausa gigante en su relación con Dios! Ellos no han avanzado más lejos de lo que lo hicieron hace 1, 5 o 10 años atrás. Estancados en el hoyo de la inactividad, muchos duermen en inconsciencia porque muchos de su círculo social “cristiano” viven en el mismo nivel de discipulado mediocre.
Esos cristianos están posponiendo en los planes de Dios y no parecen ni siquiera saberlo. Dios les ha enviado citas divinas—“buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica” (Efesios 2:10 NVI). Pero esas oportunidades celestiales vuelan a una velocidad vertiginosa totalmente desapercibidas y no usadas. ¿Qué hay de nosotros? ¿Estamos caminando en las citas divinas de Dios? Si no es así, ¿qué haremos para cambiarlo? Si queremos avanzar, ¡necesitamos estar totalmente despiertos, conscientes y alertas!
El Reloj de Alarmas de Dios
En Efesios 5:14, Pablo dijo, ”Despiértate, tú que duermes. Levántate de entre los muertos y te alumbrará Cristo” (NVI). La palabra Griega aquí traducida para despierta proviene de egeirō (ἐγείρω), que significa “despertar figurativamente, de la oscuridad, inactividad, ruinas, no existencia — despertar, elevar, levantar (nuevamente, levantarse), estar en pie, tomar” (Strong’s Concordance).
Si hemos silenciado la alarma de Dios y su llamado de despertar, necesitamos egeirō. ¡Necesitamos despertar, levantarnos, ponernos de pie! Estas son palabras poderosas que demandan acción de nuestra parte. ¿Estás listo para ese tipo de respuesta a la admonición de Pablo? ¡Los resultados serán drásticos!
Hemos Confundido el Llamado
Algunas veces le pedimos a Dios que haga cosas que Él quiera que nosotros hagamos.Si, hay cosas que Dios quiere que nosotros hagamos para sacarnos de nuestro sueño espiritual. Si hemos caído presos de las minas de la apatía, debemos cambiar la forma en que oramos. Necesitamos poner de lado oraciones como, “Dios, si quieres que te sirva, dame un corazón de siervo.” Si amamos a Dios, le serviremos a Él y haremos lo que Él dice. Jesús dijo “Si ustedes me aman, obedecerán mi mandamientos” (Juan 14:15) Eso es claro, simple y directo.
Considera algunos ejemplos más:
- Jesús ya nos ordenó a predicar Su palabra en Marcos 16:15.
- Jesús ya nos instruyó a tomar nuestra cruz diariamente y seguirlo en Lucas 9:23.
- Jesús ya nos incitó a ser generosos en Lucas 6:38.
- Jesús ya nos dijo que perdonemos en Lucas 6:37.
- Jesús ya dijo, “Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas” (Marcos 12:30).
Podría continuar pero probablemente más ejemplos bíblicos ya están viniendo a ti.
Por supuesto, vamos a necesitar la ayuda de Dios. Sin Su gracia y poder salvador, nunca floreceremos espiritualmente. Sin el poder del Espíritu Santo, simplemente somos débiles espirituales en un mundo de obstáculos gigantes.
Al mismo tiempo, debemos recordar que el Espíritu Santo ya ha venido a vivir en nosotros, dándonos poder. El apóstol Pedro escribió sobre el efecto de ese poder en nosotros con algunas palabras muy potentes, recordándonos nuestra herencia en Jesucristo: “Su divino poder, al darnos el conocimiento de aquel que nos llamó por su propia gloria y excelencia, nos ha concedido todas las cosas que necesitamos para vivir como Dios manda (2 Pedro 1:3 NVI). Dios ha a provisto el poder necesario a través del Espíritu Santo. Podemos usar Su poder en cualquier momento. Pero primero, necesitamos despertar de nuestro sueño espiritual.
Los Pocos Fieles
Alabo a Dios por los muchos cristianos que viven totalmente despiertos. Eres testigo y un ejemplo de la promesa de Pablo al cristiano despierto: “¡Te alumbrará Cristo!” (Efesios 5:14 NVI). Mantén tu pasión por Dios ardiendo. Mantén tu luz brillando intensamente. Necesitamos tu testimonio para continuar inspirando a otros creyentes en los caminos de Dios. Gracias por contar el costo y vivir una vida en la presencia del Señor y reflejando Su gloriosa luz. Gracias por habitar en la Palabra de Dios y compartir Su mensaje de esperanza. Necesitamos que continúes en el camino angosto, brillando el ejemplo de Jesús a los demás.
Dormido en la Luz
Los pocos en fuego por el Señor no son mi preocupación en momentos como estos. En este momento, estoy más preocupado por un grupo que Leonard Ravenhill y Keith Green advirtieron hace décadas—Cristianos que están dormidos en la luz. Justo ahora, muchos cristianos están caminando a través de la vida medio dormidos, tibios en su fe. Ellos beben del Espíritu Santo y ocasionalmente tienen un bocado de la Palabra de Dios mientras se embuten en las redes sociales y en el entretenimiento. Eso me preocupa profundamente.
Hermanos y hermanas, este es el tiempo equivocado para estar ‘tomando una siesta en el Espíritu.’ Los cristianas que toman siestas no se levantan lo suficientemente temprano como para pasar tiempo con el Señor, sino que se quedan despiertos hasta tarde en la televisión, Netflix y demás. Se arrastran durante el día, esperando que Dios los bendiga a pesar de su escasa búsqueda de Dios.
Estos creyentes esperan que Dios los bendiga a pesar de su estado espiritual. Si—¡el estado espiritual que ellos han elegido! Dios no lo eligió por ninguno de nosotros. Jesús prometió una vida abundante espiritual en Juan 10:10. Pero el diablo viene para matar, robar y destruir.
Esos creyentes nunca liderarán verdaderamente en el Reino de Dios. No pueden, porque constantemente presionan sus botones espirituales de posponer. No parece importarles lo que Dios quiere decirles. Tienen poco apetito espiritual: se sienten satisfechos con el mensaje de 45 minutos de su Pastor en internet del domingo pasado. No tienen tiempo para adorar a Dios, leer la Biblia u orar porque, bueno, ya sabes, ¡solo porque sí! Saben que no hay una excusa aceptable, por lo que muchos ya ni siquiera hacen una. Es un sueño espiritual, simple y llanamente. Lamentablemente, es en detrimento de ellos. Como no toman momentos a solas con Dios, caminan con miedo, duda e incredulidad. Caminar por fe ya no es su objetivo o realidad. Quizás experimentaron esa fe durante años, pero ahora se está disolviendo tan rápidamente como el hielo bajo un sol abrasador.
Buenas Nuevas para los Creyentes Dormidos
¡Ahora, algunas buenas nuevas! Después de todo, eso es lo que significa el “evangelio.”
¿Acabo de describir tu vida—aunque sea una parte de ella? Dios quiere que sepas que Él puede borrar todo eso en Su presencia. Él te está llamando a tener momentos preciosos a Su lado; una temporada de despertar con tu Padre Celestial y Señor y Salvador Jesucristo. Él te está llamando: “¡Vengan a las aguas todos los que tengan sed!” (Isaías 55:1 NVI). ¿Estás listo para despertar y caminar en la luz del Señor? ¿Estás cansado de vivir una vida espiritual apática? ¿Estás fatigado de vivir una vida sin la presencia de Dios? ¿Estás listo para despertar y experimentar las citas divinas de Dios diariamente? ¿Estás listo para bucear en las profundidades del conocimiento de Dios, mientras es revelado por el Espíritu Santo?
Dios está listo para recibir, renovarte, revivir, abrazarte y brillar Su luz sobre ti. ¡Dios está listo para renovarte!
¡Comprométete a despertar ahora! No hay mejor momento. Ora conmigo.

Buen día , gracias por ese recordatorio , por esa alarma.