by Brian Mark Weller
“Si Jesucristo es Dios y murió por mí, ningún sacrificio puede ser muy grande para mí que pueda hacer por Él” – C.T. Studd, Misionero en China, India, y África C. T. Studd era una estrella inglesa del Criquet que vivió desde 1862 a 1931. En sus años universitarios, él renunció a su carrera profesional como jugador de Criquet para convertirse en misionero. A la edad de 25, regaló una gran fortuna familiar para poder apoyar el trabajo misionero de hombres de Dios como George Miller y Hudson Taylor. C.T.Studd en ese entonces respondió al llamado misionero que Dios había puesto en su corazón siguiendo a Hudson Taylor a China, rápidamente se volvió misionero en India y con su familia regresaron a Inglaterra luego de 21 años de trabajo misionero en China e India. Él enfrentaba una severa salud muy pobre en ese tiempo y muchos esperaban que se quedara en Inglaterra. 
Pero C.T. Studd prontamente, sin esperarlo, recibió el llamado de Dios, unirse al mismo corazón de África. A la edad de 53 años, partió para África con una completa y profunda confianza en las promesas de Dios. A todas las preguntas de sabiduría a su elección, las respuestas de C.T.Studd podían ser encontradas impresas en una tarjeta postal que agraciaba su escritorio “Si Jesucristo es Dios y murió por mí, ningún sacrificio puede ser muy grande para mí que pueda hacer por Él”. Aun cuando leí la biografía de C.T. Studd hace muchos años, nunca fallé al renombrar su famosa y heroica declaración de fe en Jesucristo. Su ejemplo se mantiene para desafiarnos y como inspiración, obligándome a mantener mis ojos en las cosas que son más importantes para Dios. Se los admitiré, he fallado tantas veces en mantener mis ojos en esas cosas más importantes. Siento que no he sacrificado tanto para servir al Señor, pero como tú, tengo un fuerte deseo de servir al Señor con todo mi corazón. Estoy aún en el proceso de descubrir de poco en poco lo que servir al Señor con todo mi corazón realmente significa. Pero las citas de ánimo de fe de grandes hombres y mujeres de Dios junto con los incontables versículos inspiradores y escrituras continúan tocándome de adentro hacia afuera. Me siento obligado a darlo todo para responder al llamado y completar la Gran Comisión de Jesucristo. Todos necesitamos un recordatorio continuo de nuestro propósito inicial como creyentes y seguidores de Jesucristo. Nuestro propósito inicial es conocer a Dios y hacerlo conocido. Y cuando nos desviamos de este claro llamado bíblico, inevitablemente dormimos en un tiempo de una particular baja productividad espiritual alejándonos de ser centrados en Dios y más bien convirtiéndonos rápidamente en ser centrados en nosotros mismos. Empezamos a mirar cosas materiales y los entretenimientos del mundo para que nos puedan dar el contentamiento que buscamos en vez de mirar a Dios y luego vivir en sus propósitos y planes. En la palabra de Dios se lee en 1 Timoteo 6:6-8 “Es cierto que con la verdadera religión se obtienen grandes ganancias, pero sólo si uno está satisfecho con lo que tiene. Porque nada trajimos a este mundo y nada podemos llevarnos. Así que, si tenemos ropa y comida, contentémonos con eso.” Así que pongamos a Dios primero y mantengamos a Dios primero en todas las cosas.
Mientras buscamos completar el llamado de Dios para alcanzar el mundo, ¿Podrías continuar orando por todos nosotros con Message Ministries y por aquellos con los que trabajamos en Perú, India, y a lo largo de Asia? Nuestro deseo contínuo es ayudar a pastores indígenas, evangelistas, y misioneros a llevar el mensaje del evangelio a aquellos que están perdidos, a alimentar a los pobres, cuidar por los huérfanos, y proveer refugio para aquellos sin casa. Gracias por tu fiel apoyo a este ministerio. ¡Juntos, hacemos una gran diferencia!
Brian Weller Más Pensamientos sobre C.T. Studd:
- “¿Cómo puedo pasar los mejores años de mi vida viviendo para las honras de este mundo, cuando miles de almas se pierden todos los dias?.”
- ”Algunos quieren vivir con el sonido de la campana de la iglesia o capilla, yo quiero dirigir un taller de rescate a un metro del infierno.”
- “No nos deslicemos a través de este mundo y luego nos deslicemos silenciosamente en el cielo, sin haber tocado la trompeta fuerte y largo para nuestro Redentor, Jesucristo. Cuidémonos de que el diablo celebrará un servicio de acción de gracias en el infierno, cuando reciba la noticia de nuestra partida del campo de batalla.”